Enterado de que su hermano mayor ha sido abandonado en la deshabitada Isla de Mona por un par de traficantes de inmigrantes, Tolio formula un plan de rescate con tres amigos.
Al viaje en lancha se suma el hermano menor de uno de ellos, que presenta características de autismo o de síndrome de Asperger, y quien a la larga funge de guía por su aguzado sentido de la orientación espacial.
En Mona, los traficantes los capturan, pero otra víctima que deambulaba por la isla los rescata.
Tras estar deshidratados y delirantes, amanecen en un hospital. Se enteran de que el hermano de Tolio nunca salió de su origen, República Dominicana: la guardia costanera había interceptado a los traficantes, que terminaron por confesar el asalto a los chicos.