Cuentan que sólo el escritor con cuarenta años cumplidos es capaz de crear una narrativa de calidad, este libro viene a echar por tierra este viejo tópico, ofreciendo, a modo de brújula para curiosos navegantes, una muestra representativa del sólido trabajo de un amplio grupo de narradores nacidos entre los años 1960 y 1971.
En total se presentan treinta y ocho relatos de otros tantos escritores, precedido por un estudio orientativo y acompañados de unas breves referencias bibliográficas de cada autor. Hay historias que desbordan juventud e historias insertas en una tradición legendaria, sangrientas unas y delicadas otras, con registros que van desde el experimentalismo hasta el clasicismo o que incluyen, a veces, ambas tendencias en una difícil armonía. Al final las narraciones se imponen sobre sus propios autores, y de esta obra obtendrá el lector una confirmación de la más antigua de las lecciones literarias: cada historia tiene su lenguaje; poco importa quién la firme y, mucho menos, su edad o el reconocimiento que haya obtenido.
He aquí, pues, varios relatos que esperaban su turno para ser contados.